
¡María del Pilar, “Laura”, ha vuelto a casa!
Hoy decimos con el corazón abierto: Laura regresó a casa. María del Pilar Petro Ortiz, fue una mujer combatiente de las FARC – EP en el Caribe colombiano. En el año 2002, al dar a luz a su hijo Cristian Daniel, perdió la vida. Su cuerpo fue inhumado por sus compañeros de filas, por esa familia social, que la conoció bajo el nombre de “Laura” y con la que compartía la vida en la guerra. Desde entonces, para su madre y para su familia materna, permaneció desaparecida.
La búsqueda no fue solo la historia de encontrar su cuerpo. Fue también un proceso lleno de descubrimientos, dolores y sorpresas. Su familia no sabía que ella había tenido un hijo. Al emprender el camino de buscarla, se encontraron primero con la certeza de su fallecimiento y luego con la revelación de que había dejado un hijo. En medio de la ausencia y el duelo, la vida les regaló un encuentro inesperado: conocer a Cristian Daniel, el hijo de María del Pilar, y abrazarlo como parte de su historia y de su sangre.
Este reencuentro entre Cristian y su familia materna fue profundamente conmovedor. En él se mezclaron las lágrimas de la pérdida y la alegría del hallazgo; el dolor de tantos años de incertidumbre y la fuerza que da el amor cuando abre caminos de sanación. La familia, en medio de la tristeza de recibir el cuerpo de María del Pilar, también conoció la vida que ella había dejado en el mundo, y con ello empezó a escribir una nueva página en su historia familiar.
La entrega digna del cuerpo, fue posible gracias al compromiso de las y los firmantes del Acuerdo de Paz que hoy integramos la Corporación Humanitaria Reencuentros, quienes documentamos y acompañamos este proceso con dedicación. También gracias a la labor de la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas y al apoyo de su familia, que nunca se rindió y siguieron con el propósito de encontrarla.

María del Pilar, “Laura”, regresa hoy a los brazos de su familia, después de más de dos décadas de ausencia. Su retorno nos recuerda que la búsqueda no es solo dolor: también es un encuentro.
Hoy repetimos con esperanza: nuestra “Laura” ha vuelto a casa y abrazamos a Cristian para decirle que aquí está su familia social.